El Castillo interior

En este post, me refiero a fortaleza como a esa construcción que hemos creado a nuestro alrededor y que nos protege. Es un castillo invisible pero en el que nos escondemos cuando la vida nos pesa demasiado. Es un refugio, un lugar seguro donde descansar cuando la vida nos agota.

En ocasiones este refugio, se convierte en el lugar en el que siempre queremos vivir. Pero lo cierto es que un poco de protección nos ayuda, demasiada nos hace perdernos. 

La fotografía que acompaña a este artículo, es el Castillo Eilean Donan, está en la isla de Skye, Escocia. Esta foto fue sacada por mi hermano en un viaje maravilloso que hicimos juntos en autocaravana hace ya 5 años. 

Este castillo siempre me ha gustado… está aislado en medio de un lago y solo le comunica con la tierra un puente de piedra robusto. Siento que mi fortaleza interior es un poco así, aislada aunque con conexiones hacia el mundo que se extiende más allá de mí.  

Acompáñame en esta visita guiada a través de tu fortaleza interior.

Construyendo nuestra fortaleza

Nuestra fortaleza interior se gesta en diferentes etapas de la vida, dependiendo de cada persona y de sus experiencias. En mi caso, empecé a construirla cuando era pequeña, pero hay personas que la van construyendo a lo largo de la adolescencia o incluso en la edad adulta, cuando su vida les trae un golpe inesperado. 

Sea como fuere, esta fortaleza tiene una gran misión: protegernos.

No es tanto una protección física como emocional. Ya que esta fortaleza es invisible y vive dentro de nosotros. Nos protege del dolor emocional, es un refugio en el que escondernos cuando la vida nos presiona demasiado y no podemos con ese peso extra. 

Esta fortaleza, este castillo construido con nuestras propias manos, nos ayuda a mantenernos a salvo cuando nos sentimos vulnerables y frágiles. Es un lugar de reposo, de descanso. 

Lo ideal es que esta fortaleza tenga unas grandes puertas que nos permitan salir y entrar cuando deseemos, pero es habitual que nosotros mismos nos encerremos en ella, clausurando las puertas que nos conectan con el mundo exterior.

Y aunque esta medida de urgencia temporal nos puede ayudar, lo cierto es que si nos pasamos demasiado tiempo aislados en ella, nos dará miedo salir al mundo real… un lugar donde las amenazas acechan. 

Nuestra fortaleza puede darnos sensación de pertenencia, un lugar al que acudir cuando nada ni nadie puede comprendernos y ayudarnos. Pero hemos de ser cautelosos y no escapar al castillo cada vez que algo se desmorona, porque de esta manera, el castillo se convertirá en cárcel.

Mi fortaleza interior me ha protegido y lo sigue haciendo a veces. Pero también me he quedado encarcelada mucho tiempo y en ocasiones me cuesta salir de ella. Y eso me genera una extraña sensación física, como si estuviera atrapada… lo peor de todo es que he sido yo misma quien me he encerrado por no sufrir. 

Me gusta la soledad, el silencio, la calma, adoro estar en mi propia compañía y conectarme con mi respiración y con algo más sutil que me rodea… con esa energía creadora de todo que siempre me acompaña. Y siento que en mi castillo, es más fácil conectar con ella. 

Me he dado cuenta, con el paso de los años, de que mi castillo es en realidad mi cuerpo. Mi cuerpo es robusto, sereno, un poco lento a veces, pero es acogedor, me sostiene y apoya siempre. Por eso a veces me escondo en la respiración, en el silencio, en la quietud. 

Y es curioso que mi castillo sea mi cuerpo, cuando buena parte de mi vida lo he rechazado. 

Pero es así, mi cuerpo, como dicen los hindúes, es mi templo, mi castillo, un lugar al peregrinar para conectar conmigo misma. Y a veces me siento atrapada en mi cuerpo, como si una parte de mí quisiera expresarse pero me lo impidiera yo misma, como si algo me amarrara fuerte y me impidiera ser yo misma.

Sé que son cadenas invisibles que yo misma he creado a través de mis pensamientos, heridas y temores. Pero no por ser invisibles, tienen menos poder. Estoy intentando salir de mi castillo, abrir sus puertas para permitir que entre el frío viento de las Highlands de Escocia, para enfrentarme a los lobos que me esperan, mi miedos, y que son solo humo, una producción de mi mente. 

Y en este proceso de salida, he descubierto algunas cosas…

Saliendo de la fortaleza

Ha llegado el momento… siento que es ahora o nunca… estoy saliendo de mi fortaleza. 

Esta decisión no es fácil porque me llena de miedos, me hace sentir vulnerable y frágil.

Siento que no puedo quedarme eternamente encerrada en un castillo que yo misma he creado. Tampoco voy a derribar el castillo, es mi refugio. 

Pero ha llegado el momento de abrir las grandes puertas de mi castillo, cruzar su umbral y caminar por el robusto puente que me conecta con la tierra, con los demás seres. 

Y sé que habrá dolor, sé que me sentiré frágil, pero todo esto forma parte de ser humana. Y es que solo soy humana, tengo que recordármelo, debo dejar a un lado a mi salvadora para seguir caminando, aprendiendo, compartiendo, creciendo. 

Siento que me despojo de muchos miedos que me atenazan, miedos que nunca se han materializado, pero que me han paralizado por mucho tiempo. 

Y cada paso que doy fuera de mi castillo, es un paso de valentía, de confianza y seguridad. 

Y continúo con mi peregrinaje interior, sigo conociéndome y puliendo aquellas cosas que no me hacen sentir libre, alumbro las sombras con la luz de mi consciencia y siento que este camino de auto-indagación y autoconocimiento, no tienen fin. Lo que, curiosamente, me llena de paz y curiosidad.

Me he dado cuenta de que no hay nada escrito en mi destino, que yo y solo yo decido qué hacer con mi vida, que no hay límites más allá de los que dibuja mi mente. 

Esta salida requiere valor para afrontar los miedos que surgen por todas partes, pero una vez que sales, te das cuenta de que tus miedos son más pequeños de los que parecían desde tu fortaleza. 

Nunca derribaré mi fortaleza interior, es mi refugio, construido con mis manos. Pero al menos dejaré la puerta abierta y me permitiré entrar y salir cuando lo necesite. 

Esta salida de mi castillo, es un proceso interior, un camino de peregrinaje que me llevará a ser más libre, más madura y consciente. 

Tú también puedes salir de tu fortaleza interior, y curiosamente, debes encaminarte hacia tu interior para ello. 

No temas, no eres el único que se encuentra en esta encrucijada, yo te acompaño en mi propio proceso. 

Recuerda… tú y solo tú puedes alumbrar las sombras  

Más artículos

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la guía

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la meditación

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la guía

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Ya casi está...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la guía:

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la guía:

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la meditación

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la guía

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.