La personalidad es la tendencia que tiene un ser humano, a comportarse, entender la vida y a sí mismo, de una manera concreta.
Para mí, la personalidad o determinados rasgos de la personalidad, son como el marco a través del cual, vivimos y la vida se desarrolla para nosotros. Este marco tiene una forma concreta, aunque podemos flexibilizarlo un poco… pero solo un poco, no podemos cambiar nuestra personalidad, como no podemos cambiar nuestro color de ojos o pelo.
La personalidad es la expresión de nuestro “yo” a través de la biología, de modo que nuestro cerebro y nuestro sistema nervioso, funcionan de manera diferente en cada tipo de personalidad.
Creo que la clave de comprender nuestra personalidad, esta tendencia que tenemos a reaccionar o comportarnos de una manera concreta, está en conocernos profundamente. Y este autoconocimiento, tiene algunas fases…
- Auto-consciencia: Este primer paso es el esencial y consiste en observar nuestras reacciones emocionales, nuestro patrones de conducta, saber cómo solemos reaccionar en ciertas situaciones, cómo nos relacionamos con los demás y con nosotros mismos.
- Ausencia de juicio: Mientras nos conocemos y observarnos, es importante mantener una actitud de ausencia de juicios hacia nosotros mismos. No se trata de ser exigente y rechazarnos… se trata de comprendernos, perdonarnos y aceptarnos plenamente.
- Transformación: Solo cuando nos conocemos bien, nos observamos y no nos juzgamos por reaccionar de cierta manera, estamos en disposición de transformarnos internamente. Es así como dejamos de actuar en “piloto automático”, es así como rompemos con patrones de conducta dañinos para nosotros y para quienes nos acompañan en la vida.
Cuando me especialicé en psicooncología, se hablaba de un tipo de personalidad que se asocia concretamente al cáncer, pero existen al menos 4 tipos de personalidad que se asocian a nuestro estado de salud físico. Y esto es precisamente, lo que quiero compartir contigo.
Pero antes de que el miedo llegue a ti, quiero decirte que tener una personalidad u otra, no es una sentencia para padecer ciertas enfermedades… si eres consciente y trabajas en ti, podrás reducir el riesgo de padecer esa enfermedad.
Porque para mí, la clave está en la regulación emocional. Si te conoces bien y te regulas adecuadamente, tu personalidad no tiene por qué ser un obstáculo… al contrario, te puede ayudar a vivir una vida más plena.
Personalidad tipo A
Este tipo de personalidad, se caracteriza por…
- Personas impacientes que necesitan resultados rápidos.
- Elevada autoexigencia, son perfeccionistas y suele tener altas expectativas en sí mismos.
- Suelen ser ambiciosos y muy responsables en el trabajo.
- Actitudes agresivas y competitivas. Su impulsividad les lleva a tener conflictos con otras personas.
- Suelen ser ejecutivos o tener su propio negocio con altas expectativas de éxito.
- Todo esto les lleva a tener elevados niveles de estrés.
- Se asocia al desarrollo de enfermedades cardiovasculares (hipertensión arterial, infarto de miocardio).
Cómo contra-restar los efectos negativos de la Personalidad tipo A: Hay algunas cosas que se pueden hacer para reducir los riesgos de esta manera de vivir…
- Regulación de los niveles de estrés.
- Regulación emocional adecuada.
- Modificar el perfeccionismo patológico, por el perfeccionismo saludable.
- Aprender técnicas de relajación, respiración y práctica meditativa.
- Aprender a gestionar los conflictos.
Personalidad tipo B
Este tipo de personalidad, se caracteriza por…
- Son tranquilos y pacientes.
- Se caracterizan por ser tolerantes y flexibles.
- Tienen grandes dosis de asertividad.
- Tienen niveles de autocontrol elevados.
- No son muy auto-exigentes y no se preocupan en exceso.
- Cuando el resultado no es el esperado, lo toman como un aprendizaje.
- Tienen niveles de estrés bajos.
- Este tipo de personalidad NO se asocia a ninguna enfermedad en particular.
Elementos a tener en cuenta en la Personalidad tipo B: Me parece interesante vigilar el tema del auto-control, especialmente a nivel emocional, ya que un exceso de control emocional, puede derivar en un embotamiento o anestesia emocional. La clave está en convivir y movernos con las emociones, no en reprimirlas o encerrarlas en nosotros.
Personalidad tipo C
Este tipo de personalidad, se caracteriza por…
- Son personas complacientes y conformistas, tienden a ceder ante otros.
- Evitan los conflictos por su necesidad de sentir armonía en su vida.
- Reprimen sus emociones (controlan sus emociones, no las expresan y a veces se desconectan de ellas).
- Son personas muy racionales.
- Dificultades para afrontar situaciones negativas.
- Son pacientes y amables, silenciando sus necesidades frente a las de otros.
- Son perfeccionistas y sienten que tienen que hacerlo todo bien.
- Experimentan desesperanza y miedo.
- Pueden experimentar estrés y en ocasiones, ansiedad.
- Se asocia al desarrollo de cáncer.
Hay autores que se preguntan si la personalidad tipo C precede a la aparición de cáncer o si es una estrategia de afrontamiento de la enfermedad. Por mi experiencia profesional, un porcentaje de pacientes que son diagnosticados de cáncer, muestran las características mencionadas arriba, antes de la aparición de la enfermedad.
En el caso del cáncer, se sabe que un estrés prolongado y crónico (años), tiene efectos negativos en el sistema inmune, lo que anula los mecanismos protectores del sistema inmune sobre las células tumorales y al no deshacerse de estas células en el inicio de su crecimiento, más tarde se pueden convertir en cáncer.
Contra-restar los efectos negativos de la Personalidad tipo C: La clave para mí en este tipo de personalidad, es la represión emocional. Sentir emociones y no expresarlas ni regularlas, nos lleva a una tensión física excesiva que puede provocar estrés y desconexión emocional. El trabajo especifico en este tipo de personalidad, sería…
- Re-conexión emocional, comunicación y regulación emocional.
- Dar valor a lo que uno desea, comunicarlo y hacer lo que se quiere.
- Gestión del estrés y la ansiedad.
- Técnicas de relajación, respiración y práctica meditativa.
- Aprender técnicas de asertividad y comunicación emocional.
Personalidad tipo D
Este tipo de personalidad, se caracteriza por…
- Son personas negativas y pesimistas.
- Tienden a preocuparse en exceso y a sentir angustia.
- Suelen experimentar irritabilidad.
- Tienen baja autoestima y suelen sentir mucha tristeza.
- Se esconden en sí mismos y les cuesta compartir lo que sienten y piensan.
- Temen el rechazo de otros y por eso no comunican sus emociones ni se muestran naturales.
- Tienden a aislarse y tienen pocas relaciones sociales.
- Se asocia al desarrollo de enfermedades cardiacas (isquemia, arritmias).
Contra-restar los efectos negativos de la Personalidad tipo D: El trabajo interior en aquellas personas que presentan este tipo de personalidad, son…
- Desarrollar una mirada neutral sobre la vida, abandonando la negatividad.
- Regulación y comunicación emocional.
- Trabajar el auto-concepto y la autoestima.
- Trabajar con la mente que sobre-piensa.
- Auto-conocimiento desde la aceptación.
Conocerme para cuidarme correctamente
Si me lees desde hace un tiempo, seguramente ya sabes que soy una Persona Altamente Sensible (PAS), la alta sensibilidad es un rasgo de la personalidad que se lleva estudiando desde los años 90, aunque aún queda mucho por saber.
Una de las cosas que he aprendido al estudiar más sobre las PAS, es que no podemos vivir como viven las personas que no tienen este rasgo de personalidad. De hecho, los problemas emocionales de las PAS, surgen cuando pretenden vivir de manera contraria a lo que su cuerpo y mente necesitan.
Creo que el auto-conocimiento, es la clave para poder cuidarme de la manera apropiada. Y esta manera tal vez solo sea válida para mí… pero cuando decidí hacer lo mejor para mí, mi vida cambió. Y cuando empiezas a decidir por ti primero, puedes tener relaciones genuinas y más satisfactorias.
No se trata de ser perfectos… se trata de ser como somos y de compartir nuestra manera única de sentir y vivir la vida.
“La variedad de personalidades individuales, es la mayor fortuna del mundo”
– Aldous Huxley –


