Saboreando las emociones

Las emociones… temidas y anheladas por igual. Tan pronto deseamos ser invadidos por algunas emociones como rechazamos otras con la misma intensidad. 

Las emociones no entienden de estos dilemas humanos, porque ellas solo son mensajeras. Nos aportan información sobre si es seguro o peligroso estar donde estamos, nos señalan situaciones de peligro o nos hacen viajar en el tiempo, conectándonos con el niño que fuimos. 

Las emociones son nuestras aliadas, nos ayudan a transitar cada día por la vida y las relaciones. Por eso debemos aprender a saborear las emociones, porque nos conectan con la vida y el mundo. 

Descifrar el mensaje de nuestras emociones, es un trabajo de profundización en nuestro auto-conocimiento. Creo que es la mejor manera de saber quiénes somos. 

Porque la clave está en cómo decido responder cuando siento una emoción… siempre puedo elegir entre responder de manera consciente o responder de manera automática e impulsiva… cada ser humano tiene la capacidad de elegir cómo responde a sus emociones. 

Y daremos una u otra respuesta en base a nuestra regulación o desregulación. Hoy quiero enseñarte cómo una misma emoción puede ser sentida y experimentada de una manera muy diferente desde los distintos estados de activación de nuestro sistema nervioso autónomo (simpático, dorsal y ventral). 

Las emociones desreguladas

Como terapeuta formada en el enfoque polivagal, he descubierto nuevas facetas de las emociones. Y he comprendido cómo se originan… 

  1. Mi sistema nervioso autónomo está en un estado de seguridad (ventral) o defensa (simpático o dorsal). 
  2. Este estado del sistema nervioso da lugar a mi emoción
  3. Mi emoción da lugar a mis pensamientos y auto-diálogo. 
  4. Los pensamientos crean la historia de lo vivido, pero su origen es el estado del sistema nervioso autónomo. 

Me parece una buena forma de entender cómo nacen nuestras emociones y pensamientos. Me permite comprender las bases de lo que me hacen ser como soy. 

Desde el enfoque polivagal, las emociones desreguladas nacen de los estados de supervivencia… 

  • Estado autónomo Simpático: En este estado, sentimos estrés porque nuestro sistema nervioso ha detectado una amenaza. Es un estado que nos moviliza, nos conduce a luchar o a huir de la amenaza. Nos sentimos caóticos, con mucha energía, tratando de atacar o escapar, muy inquietos y enfadados. Sentimos que hay un peligro inminente a nuestro alrededor y nos volvemos hipervigilantes. Nos protegemos a través de la acción.
  • Estado autónomo Dorsal: Este es un estado de protección cuando nuestro sistema percibe una situación de amenaza inminente. Su función es la de desconectar el cuerpo de nuestra consciencia, provocando la disociación. Dejamos de estar conectados con nuestro entorno y entramos en un proceso de colapso, lo que nos lleva a dejar de tener energía, nos paralizamos y estamos ausentes. En los animales, este es el estado en que “se hacen los muertos” hasta que el peligro pasa. 

Cuando estamos muy desregulados, las emociones las sentimos…

  • Más intensas y apremiantes. 
  • Nos impulsan a actuar rápidamente. 
  • Físicamente generan nudos, vacíos y presión. 
  • Nos desgastan rápidamente porque movilizan mucha energía. 
  • Entramos en un estado de auto-defensa. 
  • La comunicación será agresiva y centrada en defendernos. 
  • La mente está caótica y no puede pensar con claridad. 
  • Tenemos dificultades para regularnos porque el objetivo es sobrevivir. 
  • Cuando la emoción se retira, nos deja agotados. 

Si nos encontramos en un estado de supervivencia (simpático o dorsal), nuestras emociones estarán desreguladas porque se enfocarán en ponernos a salvo y eso nos aleja del equilibrio. 

Las emociones reguladas

Desde la mirada polivagal, las emociones están reguladas cuando nos encontramos en el estado Ventral del sistema nervioso autónomo. 

El estado Ventral se caracteriza por ser un estado de bienestar y equilibrio, nos sentimos seguros, nos permite comunicarnos y conectarnos de manera segura con nuestro entorno. Este estado del sistema nervioso, es el que nos permite relajarnos y disfrutar de toda la belleza y bondad que nos rodea. Es el estado de la gratitud, la alegría y el equilibrio interior. 

Las emociones reguladas se sienten…

  • Expansivas, pueden ser intensas pero nos conectan. 
  • Nos damos tiempo para saborear y sentir la emoción. 
  • Físicamente generan sensaciones de apertura, bienestar, relajación. 
  • Nos aportan energía y nos ayudan a conectar con otros. 
  • Entramos en un estado de bienestar y equilibrio. 
  • La mente está abierta y es flexible, surgen posibilidades. 
  • Nos comunicamos con amabilidad y amor.
  • Se moviliza la gratitud, empatía y compasión. 
  • Podemos enfocarnos y profundizar en lo que estamos haciendo. 
  • Cuando la emoción se retira, nos deja con una sensación de alegría y gratitud.

Debes saber que nuestro trabajo con las emociones, está en identificar en qué estado se encuentra nuestro sistema nervioso y hacer lo posible para poder elevarlo. De esa manera podremos regularnos y volver a “casa”, a ese estado en que todo es posible, hay esperanza y podemos ser nosotros mismos. 

Si te interesa el tema de la teoría polivagal, te invito a leer este artículo donde profundizo más en ese tema.

Saboreando las emociones

Para mí, saborear una emoción, es dejarme embargar por ella. Dejar que la emoción me cuente su historia y tratar de no dejarme absorber por ella. 

Saborear las emociones es como la fotografía que acompaña a este artículo… es dejarme bañar por los diferentes colores y energías que trae consigo la emoción, esté en el estado en que esté mi sistema nervioso autónomo. 

Quiero enseñarte cómo es vivir una misma emoción desde los tres estados de nuestro sistema nervioso autónomo. 

Para ello, voy a compartir contigo el viaje que he realizado muchas veces a través de la tristeza en estos tres estados. Comprobarás que aunque te hablo de la tristeza, en cada estado le doy un nombre diferente porque eso describe mejor lo que siento.

  • La tristeza en simpático = Desolación: Cuando entro en estado simpático, mi cuerpo reacciona con taquicardia, respiración entrecortada, me tenso físicamente, pienso que el mundo es amenazante y que yo estoy demasiado expuesta. Pienso que debo irme de ese entorno y a veces siento que debo defenderme, gritar. La tristeza no es demasiado habitual, pero cuando llega, la siento como desolación. Me habla de haber fracasado en mis intentos de afrontar una situación crítica con calma. Es desolador sentir que estoy en un mundo tan amenazante, donde debo defenderme y dejar de ser yo misma para sobrevivir (no ser empática y amable). 
  • La tristeza en dorsal = Melancolía: Cuando estoy en el estado dorsal, siento que un agujero negro me absorbe. Es una energía tan potente que de nada sirve luchar, por eso suelo dejarme absorber por esa oscuridad densa. En este estado, mi cuerpo se siente agotado, somnoliento, pesado, con muchas ganas de llorar y un nudo en la garganta. Siento que el mundo es injusto y no hay esperanza y que yo soy insignificante. Este estado me era muy familiar en la adolescencia… me quedé a vivir un tiempo en él y recuerdo haber sentido una tristeza profunda porque no había esperanza. Para mí, este estado es el de la melancolía profunda. Incapaz de mirar al futuro y añorando un pasado que nunca volverá. En este estado surgía una versión diferente de mí, me encerraba en mí y solo quería ser invisible, desaparecer. 
  • La tristeza en ventral = Tristeza: Cuando estoy en ventral, siento mi cuerpo relajado, con energía, puedo respirar con calma, me enfoco, me conecto a mí y a los demás. Mi mente me dice que todo es posible, que todo encaja, que soy capaz. Siento que el mundo está lleno de posibilidades y que yo soy amorosa y capaz. Es un estado muy expansivo y lleno de quietud. Incluso en este estado, me visita la tristeza, aunque tiene un matiz especial… Puedo estar conectada a la belleza que me rodea o a una persona a la que aprecio y añorar ese momento fugaz que está por desaparecer. En Japón tienen una palabra que ayuda a describir este estado… “Aware”, es un sentimiento profundo evocado por la belleza efímera de las cosas o situaciones de la vida. Es una mezcla de tristeza, alegría y nostalgia. 

Como has podido comprobar, querido lector, nuestro mundo emocional es un universo muy rico que podemos explorar sin miedo. Porque cuanto más conocemos a nuestras emociones y estados del sistema nervioso autónomo, más disfrutamos de nuestra vida. 

“Sé consciente de que en este momento estás creando. Estás creando tu próximo momento basado en lo que sientes y piensas. Eso es lo que es real”

– Doc Childre –

Más artículos

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la guía

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la meditación

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la guía

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Ya casi está...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la guía:

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la guía:

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la meditación

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.

Solo queda un paso...

Rellena estos datos para que pueda enviarte la guía

Elena Alameda Jackson como responsable del tratamiento y legitimado por tu consentimiento tratará tus datos con la finalidad de gestionar el envío de información y prospección comercial y envío de boletines informativos. Tus datos estarán alojados en mi plataforma de email marketing Active Campaign, que se encuentra en EE.UU y adherida al acuerdo Privacy Shield. Tienes derecho a acceder, rectificar, oponerte y suprimir tus datos, así como otros derechos, en info@cuidado-psicologico.es o ante la autoridad de control. Tienes información adicional en la política de privacidad.